Ayuntamiento de Puebla anuncia programa para erradicar la violencia de género

El Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Claudia Rivera Vivanco, informó sobre las acciones que se llevan a cabo para prevenir y erradicar la violencia de género en la capital.

En conferencia de prensa, la alcaldesa destacó que, alineados a las estrategias implementadas desde el Gobierno Federal, se llevará a cabo el programa nacional de Puertas Violetas.

La estrategia se compondrá por una Unidad de Atención, ubicada en la Dirección Jurídica del Sistema Municipal DIF (SMDIF), 16 sur #3911, colonia Anzures, así como un refugio temporal de atención a víctimas de violencia. El SMDIF coordinará la estrategia, la Secretaría para la Igualdad Sustantiva de Género (SISG) realizará la vinculación con las usuarias y la Secretaría de Seguridad Ciudadana, el Instituto Municipal de Planeación, Secretaría de Bienestar, Sindicatura Municipal, jueces calificadores y quienes integran la Comisión de Derechos Humanos e Igualdad de Género del Cuerpo Edilicio coadyuvarán para ejecutarla de manera óptima.

Dentro de la Unidad de Atención “Puerta Violeta”, el SMDIF brindará respuestas inmediatas en temas legales y psicológicos, con el objetivo de prevenir y evitar que se agraven las condiciones de violencia de género que viven las mujeres. En caso de ser necesario, ya sea desde la SISG o desde los enlaces que tendrá cada dependencia para atender estos casos, las mujeres en condiciones extremas de violencia de género serán canalizadas al refugio temporal de atención a víctimas de violencia.

El lugar tendrá capacidad para 26 usuarias con sus hijos, allí tendrán acceso a hospedaje, alimentación, atención médica, dental, psicológica, acompañamiento jurídico, trabajo social y serán partícipes del Programa Integral “Soroser” de empoderamiento y acompañamientos a mujeres víctimas de violencia y sus hijos por un plazo de 90 días; al terminar el período, se les continuará dando seguimiento para evitar que las usuarias vuelvan a caer en situaciones de violencia.

La unidad estará conformada por una coordinadora, tres trabajadoras sociales, tres psicólogas, tres abogadas, tres médicas, tres enfermeras, tres pedagogas, una auxiliar administrativa, una intérprete de lengua indígena, dos vigilantes, dos conductoras y dos encargadas de limpieza.