Desde la madrugada y con la presencia de representantes de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), granaderos de la policía estatal obstaculizaron, con operativo de por medio, la instalación total del tianguis regional de Atlixco por las medidas sanitarias para prevenir contagios masivos de Covid-19.
No obstante, un grupo de alrededor de 100 vendedores “independientes” , encabezados por Abel N., trataron de colocarse en las calles y al encontrarse con las filas de policías solamente expresaron sus reclamos: “únicamente queremos vender para sobrevivir”.
A pesar de ello, permanecen vendiendo su mercancía en la vía pública y con separación de 10 metros respecto a las fuerzas de seguridad pública. “Queremos una mesa de diálogo con el gobernador Miguel Barbosa para arreglar esto de una vez por todas”, señaló uno de los comerciantes.
El ambiente general en las cercanías del tianguis es de tranquilidad, sin embargo hay molestias entre miembros de esa organización. Por ejemplo, amenazaron la semana pasada con salir hoy sábado y lanzaron la advertencia de volver el martes siguiente, situación criticada por sus homólogos y por un amplio sector de habitantes quienes piensan que esa postura es una “necedad” al ya existir alternativas y más posibilidades.