Los familiares exigen a autoridades penitenciarias den las pruebas de laboratorio confirmando que sus familiares internos tienen COVID-19.
Por la tarde, varias de familias de internos del Centro de Reinserción Social de Puebla (CERESO San Miguel) se reunieron en el centro penitenciario para establecer un diálogo con las autoridades para saber la situación de sus reos, mismos que serán trasladados al CIEPA para recibar tratamiento médico.
Los familiares se encuentran molestos ya que las autoridades penitenciarias no han informado sobre el estado de salud de sus internos, ya que algunos de ellos fueron aislados del resto de la población carcelaria por presuntamente estar contagiados de COVID-19.
Los manifestantes pretenden ingresar al penal para hablar con la administración del CERESO de San Miguel y aclarar la situación, además de solicitar que les muestren las pruebas de laboratorio que confirmen que sus familiares son portadores del coronavirus.