Tres semanas después de que la Secretaría de Seguridad Ciudadana fuera desalojada de las oficinas del C5, que pertenecían al gobierno del estado, el Ayuntamiento cobró venganza y pidió a la administración estatal salirse de tres inmuebles que les pertenecen.
Parecen hasta ayer haber empatado el marcador 1-1, pero esto podría cambiar este viernes pues se tiene planeada una Sesión de Cabildo para la aprobación del Estado de Origen y Aplicación de Recursos de la alcaldesa, Claudia Rivera Vivanco.
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, ya ha demostrado que varios de los regidores están de su lado y en este momento de caos y crisis, si Rivera no cuida bien sus números, el cabildazo podría concretarse.
El lunes parecía que estaba tratando de mandar un mensaje de paz, cuando la alcaldesa dijo que su administración donaría 15 millones de pesos para ayudar al estado a combatir el coronavirus.
El martes, en la rueda de prensa que ofrece diariamente, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa pareció recibir con agrado la noticia, aunque evidenció que tampoco ese dinero sirve para mucho: “que se compren respiradores y que nos donen mejor en especie, alcanza para unos 13, dijo”.
Luego, soltó algo más fuerte, que todos los Ayuntamientos, aunque no dijo específicamente Puebla, pero estoy seguro de que se refería más que nada a ese, tienen tres días para dejar las calles libres de ambulantes y evitar así la propagación del coronavirus.
Pareció que los vendedores informales ya lo sabían, porque desde temprano evitaron ocupar las calles que normalmente utilizan en el primer cuadro del Centro Histórico, incluso muchos medios y reporteros publicaron casi casi que ya estaba completamente libre.
No ocurrió así, lo único que hicieron los ambulantes fue irse a amontonar a la 16 poniente, tomaron parte de la banqueta y provocaron otra vez la aglomeración, por supuesto, sin medida sanitaria alguna.
La tarea es titánica, no solo deben desalojar a los informales, además ya no se permitirá la instalación de tianguis en todo el estado, y eso también será muy difícil de controlar.
Para Barbosa, Puebla ya está en un alto grado de contagio, es por ello que ese tipo de medidas son fundamentales, sino se cumplen, dijo, usarán la fuerza pública.